domingo, 8 de enero de 2012

Experiencia de intercambio en el exterior

Hola chicos como les contamos en la edición de Diciembre, una compañera decidió compartir con nosotros como fue su experiencia de intercambio en México a continuación anexamos la carta que nos envió:


Universidad Católica Andres Bello
Estudiante: Luz Marina Manzano Gómez
Dirigido como noticia a: El periódico El Ucabista

-.Presente:
¿Qué fue para mí hacer un intercambio?
Renacer, reorientarse, y ubicarse en el tiempo y el espacio de la vida actual conforme a los objetivos que se deseen lograr. En principio, la presentación, mi nombre es Luz Marina Manzano, tengo 24 años, estudio psicología y escribo esta nota porque es mi deber social luego de esta experiencia. Si hay algo que esta estudiante debe agradecer en principio a Dios y luego a la Universidad Católica Andrés Bello (aparte de haber pertenecido a la agrupación Universitarios en Misión y haber hecho un proceso de ejercicios espirituales ignacianos) es mi intercambio a México 9 meses, 2 semestres: Agosto 2010-Mayo 2011.
Creo haber escuchado algo así antes, pero lo retomo porque fue mi vivencia y deseo compartirla: Si deseas conocer más de ti, quédate sólo un día en un lugar desconocido con gente desconocida, si deseas conocer más quiénes son tus amigos y quiénes sólo están por intereses, viaja el tiempo suficiente para que “te olviden”, tal vez 6 meses (“sólo tal vez”, como diría una gran amiga mexicana),si deseas conocer lo que realmente valoras déjalo todo (casa, familia, amigos, novi@, y lugar de estudio/trabajo si es necesario) por un sueño que te acelere el corazón y quite el sueño por las noches pero te de paz todo el día, si deseas conocer una cultura distinta a la tuya, sé uno más de sus integrantes, vive dentro de ella la mayor cantidad de tiempo posible, y si logras amar a un hermano de otra nacionalidad con sus virtudes y defectos, tu corazón comprenderá que las fronteras no tienen sentido, y tu razón entenderá que todos somos lo mismo, con dones, ideas y rituales diarios distintos pero con grandes coincidencias en sentimientos tanto positivos como negativos, compartiendo así el hecho de ser “humanos”.
Viajar a otro país es costoso, eso no se puede negar, pero con dignidad puedo decir que no me arrepiento de haber trabajado cuidando niños cuando me tocó hacerlo, y no faltó quien me brindará apoyo y cariño, porque una cobija o un plato de comida lo puede compartir mucha gente pero el amor, en estos días escasea, y la calidez y gentileza del mexicano debería dar envidia de la buena; en este sentido me molesta un poco cuando hay personas que dicen que en México hay tantos o más problemas de violencia que aquí, porque eso no les quita ni a ellos ni a nosotros que haya gente maravillosa que se desviva por hacerte sentir bien por el simple hecho de agradarte y de compartir, sólo eso, así de sencillo y especial, sin mayor malicia que eso, compartir amor fraterno y dar el ejemplo…Estas palabras “me late” que muchas personas no las concientizan, por eso escasean, igual las repito para que haya un eco: “verdadero amor fraterno”.
¿Cómo fue la experiencia de estudiar en la Universidad Iberoamericana?
Fue sencillamente ver el cielo, respirar hondo agarrando una cruz que se me hizo “amor” cargar, y sentir que estaba en El Paraíso. Estudiando psicología se diría que esto es sublimación…pero es racionalización, porque es “concientizar” que al amar lo que haces, o en este caso, lo que estudias, no se hace tan pesada la tarea que implica (a menos que sean varias cruces a la vez, lo que cambia la perspectiva).
Pude introducir (por gracia de Dios y reglas de la uni) materias de otras carreras, así como otros idiomas, y no puedo decir que no me exigieron igual o más que aquí en mi universidad de origen, porque los trasnochos y días sin salir (a pesar de querer “turistiar”, como dicen allá, y visitar más México) estuvieron allí en el cronograma del viaje; pero debo decir que aunque en ideas disintiera con algunos profesores o simplemente coincidiera con otros reafirmando valores y creencias, los amé a todos porque supieron tratarme como discípula más que como “mera” alumna, me dieron respeto, valor como persona y a mis estudios como estudiante, impulso y motivación de llegar tan lejos como pueda, llegando a traerme a mi país con orgullo, una mención honorífica de un Modelo de las Naciones Unidas realizado en la Ibero, como delegada de mi pequeña Venecia .
Es para mi persona un completo deber invitarle a leer a todo el que desee un cambio trascendental hacia la sensibilización humana, los libros “El Hombre en busca de sentido” del psiquiatra austríaco Viktor Frank y “El miedo a la libertad” del psicólogo y filósofo alemán Erich Fromm, (se pueden encontrar en internet) éste último facilitado por mi estimada profesora de pastoral Maria Auxiliadora Alvarez, Dra. en Psicología, a quien agradezco y bendigo por tanta orientación, gracias profe . Es importante la revisión interna y reflexión en el ejemplo y enseñanza que se deja a otros en el diario vivir, si deseamos una Venezuela con ciudadanos y profesionales humanizados.
Mi camino como estudiante ahora es otro, a pesar de que continuaré la carrera pronto Dios mediante; hubiese sido mi deseo continuar en esta hermosa y excelente universidad que tanto me ha dado, pero por motivos personales ahora debe ser otro mi camino, Dios ha dispuesto otros planes para mi futuro profesional (Dios mediante), y sólo a través de la oración, buscándole los he ido discerniendo, y contra ÉL, nadie… el que lo intente caerá más temprano que tarde…así fue y sigue siendo mi deseo seguirle, como decía ese ejemplo de amor hecho mujer, la Madre Teresa de Calcuta: “el que no vive para servir, no sirve para vivir. Dicho todo esto, mi recomendación para quienes deseen hacer un intercambio y tengan los medios (y si no los tiene luche por ellos hasta conseguirlos), no lo duden, es una experiencia de la que nunca se van a arrepentir, porque mientras para unos te estés alejando un año de la graduación de tu carrera, para ti, sabrás que estarás ganando uno de los mayores aprendizajes y preparaciones de la carrera de tu vida.
Mis agradecimientos a la Secretaría de Relaciones Internacionales UCAB por el apoyo en los trámites necesarios, a mi psicólogo Alvaro Ochoa por escuchar y orientar a encontrarme con mis aspiraciones, a la Profesora Sheila Goncálves y al Padre José Francisco Aranguren S.J. por el acompañamiento espiritual en este arduo Camino, a mi familia por no dejarme sola en este viaje, a Gustavo Hernández por tanto amor recibido a pesar de la distancia, a todos los que me apoyaron en esta locura y a los que no también por ayudarme a reafirmar mis valores y creencias, y a Dios sobre todas las cosas porque sin ÉL nada soy…PD: Mi Alfa y mi Omega he cumplido y todo se ha cumplido . Sin más que decir, GRACIAS UCAB .

Caracas, 05 de noviembre de 2011

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